Un Solo Dolor El sol se destroza en pequeños arcoíris para cruzar mi piel y hacerme sudar como si estuviese acostado cerca de una tortuga en el piso de un jardín botánico. No quiero seguir viviendo, solo espero que se apague mi corazón de un solo dolor. Luego me iré a dormir con alguna serpiente mansa en el casco de la ciudad para no aburrir a los gallos ni provocar tormentas.