Un Amor
Fue bolsillo de mesa de ocho negro para todas sus rayas, el único que ella no se molesto en tocar. Ablandó su permanente aparentando ser chico duro de campo que sabia las reglas del billar, periodista inverosímil de bailarinas y gongos, viaje bárbaro de peine fino, no hubo otra consecuencia posible que ser modificador de vida. . © Sergio A. Ortiz, 15 de marzo de 2010